Crea hábitos con alma.

El mes de diciembre del año 2023 empecé a leer el libro de Greg McKeown que se titula: Sin esfuerzo. Facilita lo que importa. Es el segundo libro que leo de él, el primero fue hace algunos años, quizá 5 ó 6 y fue el de Eeencialismo. Ambos se los recomiendo mucho.

El punto y objetivo de esta entrada del blog es simplemente destacar para esta época del año (inicio de año) o para cualquier otra, pero considero que esta es clave porque todos estamos motivados aún, una parte muy crucial (para mí) de este libro. En la página 63 tengo algunas líneas subrayadas y aquí te comparto un poco lo que creo deberías tomar en cuenta y reflexionar.

El libro, dice así:

Los rituales son similares a los hábitos, en el sentido de que "cuando hago X obtengo Y". Pero son diferentes por un componente clave: la satisfacción psicológica que experimentas cuando los haces. Los hábitos explican "que" haces, pero los rituales son sobre "como" los haces.

🤯 ¡Si no te estalló la cabeza, léelo de nuevo! Hablando desde mi experiencia, el lograr hacer de una actividad nueva un hábito ha sido una tarea muy difícil y en muchos de los casos imposible, por lo que termino fracasando 😥 y lo vuelvo a intentar y lo logro, dos días, tres días... una semana y después, lo abandono. Pero desde que leí esto, empecé a detectar la importancia de convertir ese hábito un ritual, mientras que, por otro lado, trabajé muchísimo, pero muchísimo (y aún lo hago) en ser completamente honesta conmigo, de modo que no me pongo cómoda y ya no me justifico, en cambio: reflexiono, reconozco y trabajo en eso.

Siguiendo con el texto, continúa poniendo un par de ejemplos que te quiero compartir. Refiriéndose a Marie Kondo escribe: "el acto de doblar es más que compactar la ropa para guardarla. Es un acto de cariño, una expresión de amor y aprecio por la forma en que estas prendas apoyan tu estilo de vida. Por lo tanto, cuando doblamos, debemos poner nuestro corazón en eso, agradeciendo a nuestra ropa, proteger nuestro cuerpo".

Lo que cambia la vida aquí es que la recompensa más allá de lo que aprecia el observador externo. Por ejemplo, Agatha Christie escribió sus mejores misterios mientras comía manzanas en la tina. "Cada mañana, Beethoven preparaba su café contando, uno por uno, 60 granos para la taza de café".

El autor continúa escribiendo: Sin importar lo tontos que pueden parecer estos comportamientos en la superficie, hacerlos de manera constante puede mantenernos en la tierra, calmar nuestras ansiedades y regresarnos al estado de sin esfuerzo de maneras que con frecuencia sólo nosotros entenderemos,

Los rituales son hábitos en los que plasmamos nuestra huella.

Los rituales son hábitos con alma.

🤯

Espera, sigue leyendo que viene el cierre:

Tienen el poder de transformar una tarea tediosa en una experiencia que genera alegría.

Cuando invitamos a la dicha a nuestra rutina diaria, ya no anhelamos el día lejano en que podría llegar.

Hasta aquí las palabras en el libro de Greg McKeown.

Definitivamente, muchos de nosotros en esta época del año aspiramos a realizar hábitos y consagrarlos en nuestro día a día; sin embargo, hay barreras que nos detienen y aunque no hay un estándar o reglas universales, aquí te dejo lo que yo he detectado como esas barreras:

  1. Poco enfoque. Necesitamos entender que debemos enfocar nuestros esfuerzos para lograr ese objetivo. Enfoque, enfoque y más enfoque y ante cualquier distracción, regresar al camino tras reconocer que me he desviado de ese enfoque que me conducirá al objetivo
  2. Vergüenza. A veces siento algo de vergüenza por alguna actividad u objetivo por lograr, ya sea el famoso "que pensarán de mí" o las "opiniones" o simplemente hacerle caso a este intruso mental que me ridiculiza y crea en mi mente 3mil escenarios de cosas que podrían pasar.
  3. Autocompasión. Para mí la peor de todas. Si quieres lograr algo, déjate de justificar, responsabilízate del proceso, de los resultados y trabaja por ello.
  4. Poca honestidad. Aquí se combina un poco por la autocompasión y la justificación ante un compromiso que hiciste contigo y que quebraste. Sé honesto u honesta contigo, reconoce lo que debas reconocer, reflexiona y ve por lo que quieres para ti y tu vida.
  5. Procrastinación. Uff! el bendito mañana queda... has lo imposible por cumplir tus compromisos. No lo dejes para después. Si implica 5 minutos más de esfuerzo dáselos. ¿No tienes tiempo? Fácil, quítaselo a la hora de comer, a la hora de ver televisión, a la hora de ver el celular. Te aseguro que tiempo tienes.
  6. No medir los resultados. ¿Cómo sabemos si vamos cumpliendo lo que nos proponemos? Lo que no se mide no se puede mejorar (eso dicen por ahí) así que encuentra la forma en que puedas llevar un registro. Un habit tracker te puede ayudar, una hoja, un calendario o algo en donde puedas evidenciar, visualizar y medir tu progreso.
  7. Falta de propósito. ¿Eso que quieres lograr en verdad te emociona? A veces es más una métrica de vanidad o algo que está haciendo "x" o "y" y quieres imitarlo, lo malo de esta pésima práctica es que el furor se apaga rápido, ese shot de adrenalina se drena rápido. Necesitas algo que mantenga esa adrenalina atrapada en tu cuerpo, un propósito que funcione como propulsión diaria que te haga ir por más y lograr lo mejor para ti.
  8. Te comparas. Cada quien va a su ritmo, tarde en entenderlo al 100%, pero lo entendí, sigo trabajando en eso y fui más feliz. La Presión tremenda por lograr "x" o "y" cosa dejo de perseguirme cada noche en silencio. No te compares porque puede ser un freno de mano inmenso, créeme.

Esta lista puede ir creciendo, porque seamos honestos, hay muchas cosas que nos detienen y tiene que ver más con nuestros prejuicios y buscar la recompensa y resultado inmediato que la capacidad que podamos tener. Yo creo que soy capaz y creo que tú también.

Controlemos lo que podamos controlar, no nos conformemos con lo bueno, vayamos por lo excelente, disfrutémonos el proceso y seguro, el resultado nos va a sorprender. 

En el libro de hábitos atómicos, James Clear habla del efecto compuesto y dice: trabaja por ser 1% mejor cada día. Si lo piensas así... al final del año serás 366% mejor que el año pasado. 🤯 366% porque este año es bisiesto, no falta el que me diga que el año tiene 365 días...

Escribí esta entrada del blog porque todo esto me ha ayudado de cierta forma a mejorar mis días y estar en la constante búsqueda de ser una mejor versión de mí, para mí. Ojalá sea de ayuda para alguien y de perdido, haya motivado a leer el libro.

De entrada te comparto, escribir esto y reescribir lo que venía en el libro textualmente me ayudo y para mí eso ya es ganancia. En mi instagram personal estaré compartiendo más de tomar notas, lo análogo y escribir, escribir mucho. Aquí te dejo los usuarios de mis cuentas: @angelicarubio y @angelica.rubio.notes